lunes, 6 de diciembre de 2010

Idioma


Tan bonito que es el español y como lo echamos a perder… Esto lo encontré hoy en Excélsior es de Agustín Basave y estoy completamente de acuerdo:

El español que hablamos los mexicanos de hoy (---)… es producto de evasiones. Está hecho de sutilezas y circunloquios, de redundancias y criptografías. Los diminutivos, los escapes semánticos, las fórmulas churriguerescas de cortesía, todo está diseñado para evitar que se trasluzca lo que sentimos o pensamos y para evadir la confrontación.

Las escuelas mexicanas privilegiaron durante muchos años —y muchas de ellas todavía lo hacen— la largueza en la expresión escrita. Su costumbre ha sido fijar límites mínimos en lugar de extensiones máximas. A muchos padres nos ha tocado revisar la semblanza de algún prócer que un hijo atribulado nos trae a revisión y que él juzga inconclusa, mientras nosotros la encontramos completa. "Pero es que el maestro nos dijo que teníamos que escribir por lo menos cinco hojas", responde el niño, "y mi tarea sólo tiene tres". El alumno que por cualquier causa tiende a la concisión no tarda en ser encauzado hacia la paja. Es entrenado para rellenar sus escritos, y luego sus alegatos orales, con cientos de palabras que no representan una sola idea adicional. No se le enseña que para que un discurso sea inmortal no tiene que ser eterno. En suma, no tenemos capacidad de síntesis: fluctuamos entre la grandilocuencia y la sosería porque somos incapaces de concebir el punto intermedio de la austeridad elocuente. Aprendemos a decir mucho y poco para enredar a nuestro interlocutor y acabamos enredándonos nosotros mismos.

5 comentarios:

  1. Yo por eso cuando me encargaban tareas de 30 hojas, hacía la letra del tamaño del renglón.

    ResponderBorrar
  2. N'ombre chato no hay que ser, como será'sté de incriminoso...

    ResponderBorrar
  3. Don Jesus Olague Moreno sabia que ese era tu segundo apelativo, ¿no que no? Si cuando no digo una cosa digo otra...

    ResponderBorrar
  4. JAJJA!!
    Muy cierto todo lo que escribiste que dijo el otro, me parece que cuando el río suena es por que agua lleva.
    Para muestra bastese con checar los mensajes en cualquier celular.
    je!

    ResponderBorrar
  5. Ay Sender... Ay Sender... y tu apellido es Lazcuráin y Torquemada de Botija... Sure!

    Pero sí tienen razón. El texto el comment de Mr. Olague y el tuyo.. Entre Chespirito y cantinflas que queriamos...faltan los Polivoces, claro está.

    ResponderBorrar

Yo no soy mamón, pon lo que quieras.